Estaba comiendo arándanos con mi dragón. Mi dragón es quisquilloso con la comida. A él solo le gustan los arándanos que son perfectamente redondos y dulces. Si no son dulces, él los escupe. “Eso es desperdiciar la comida” le dije. Pero a mi dragón no le importaba, simplemente encogió sus alas y señaló las bayas que yo había escupido. Entonces le dije a mi dragón: “Guarda silencio.”
Cuando nos quedamos sin arándanos, pasamos a las fresas. Hay un matorral de fresas en el bosque junto a mi casa. Son fresas silvestres así que tenemos que estar callados. Las fresas silvestres son tímidas.
Mi dragón es muy sucio al comer. Esta vez se salpicó jugo de fresa por todo el hocico y las pestañas. “Eres un cerdo” le dije. Pero a mi dragón no le importaba, simplemente encogió sus alas y señaló mis manos rojas. Entonces le dije a mi dragón: “Guarda silencio.”
Cuando nos quedamos sin fresas, pasamos a las sandías. Hay un árbol de sandía en mi patio trasero. Elegí dos que parecían jugosas y mi dragón los partió por la mitad sobre su rodilla. Luego empezamos a comer. Yo escupí las semillas, pero mi dragón se las tragó. “Se supone que no debes tragarlas,” le dije, “porque un árbol de sandía podría crecer dentro de tu estómago.” Pensé que me había sacado la lengua pero no, la lengua de un dragón es negra como el regaliz. Esto era verde, era una hoja. Luego más hojas salieron de su boca, luego una rama. Definitivamente era un árbol.
“Te lo dije” le dije.
Mi dragón parecía nervioso, se le veía inseguro.
"¿Qué crees que deberíamos hacer?" dije.
Mi dragón encogió sus alas.
“Tal vez… deberíamos esperar y ver,” dije. A mis padres les gusta decir eso.
Mi dragón asintió con la cabeza. Mientras esperábamos, el árbol creció. Creció rápido. Para la hora del almuerzo, era tan grande como yo. Entré a la casa para almorzar y cuando volví a salir, había un árbol de sandía adulto y maduro que sobresalía de la boca de mi dragón. Ya había pequeñas sandías creciendo en él. Yo no quería quedarme mirándolo fijamente, pero no pude evitarlo.
"¿Puedes respirar bien?" le pregunté.
